domingo, 13 de enero de 2013

Un día soñé un reto

(Entrada propia. Re-post de "Your soul is unbreakable". 16/04/12)

Un día soñé un reto.
Soñé con el agua y el aire,
soñé con mis recuerdos.
Soñé que salía a la calle,
soñé que estaba lloviendo.
Por no querer mojarme,
llevaba un paraguas abierto,
no era mío ni de nadie,
era un paraguas viejo.
Llovía con fuerza esa tarde
y el paraguas se acabó rompiendo.
Seguía sin querer mojarme
y volví a casa corriendo.
“Qué hago ahora” comencé a alarmarme,
“no puedo enfrentarme al viento,
ni tengo con qué resguardarme,
¿dónde consigo un paraguas nuevo?”
Debía volver y salir a la calle,
debía correr con mi último aliento.
Sabía que me arriesgaba a mojarme
y a calarme hasta los huesos.
Pero aún así salí a la calle,
aún así rechacé mis miedos.
Sé que aún me arriesgo a mojarme
y a quedarme empapada de nuevo.
quizá me arrepienta y espante,
pero no me arrepentiré al menos
de haberme enfrentado a los mares,
de haber afrontado mi sueño.

Dedicado a todos los soñadores que persiguen un sueño que los demás consideran imposible.
En esta vida, lo único imposible es dejar de soñar. Lo mejor es luchar por tus sueños mientras el corazón aún tiene fuerzas para volar, antes de que el saco de sueños rotos se haga lo suficientemente grande y pesado como para mantenerte atado al suelo.

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